El 7 de febrero del año 2000, la Organización de Naciones Unidas (ONU) designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La historia de este día surge a partir del asesinato de las hermanas Mirabal, activistas políticas en la República Dominicana, quienes por orden del dictador Rafael Trujillo fueron asesinadas el 25 de noviembre de 1960. Posteriormente, el 20 de diciembre de 1993, la ONU emitió la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer [1].
La ONU menciona que entre las formas más comunes de violencia en contra de la mujer se incluyen la violencia física, psicológica, sexual, económica y patrimonial. Las desglosa de la siguiente forma [2]:
- Violencia causada por su pareja: violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, feminicidio.
- Violencia sexual y acoso: incluye todo tip de violencia sexual como violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético.
- Trata de seres humanos: esclavitud, explotación sexual.
- Mutilación genital.
- Matrimonio infantil.
Además la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) incluye los siguientes tipos de violencia:
- Violencia económica. Poner limitaciones para controlar el ingreso económico de la mujer. En el contexto laboral se puede considerar violencia el percibir un salario menor por igual trabajo,
- Violencia patrimonial. Consiste en sustraer, destruir o retener, documentos personales, bienes y valores, derechos patrimoniales o recursos económicos de la mujer.
Es importante que tengamos en cuenta todos los tipos de violencia mencionados que se pueden ejercer en contra de la mujer. La violencia no solo es física o sexual, aunque esos tipos se identifican más fácilmente ya que la mujer es más vulnerable contra la fuerza física de un hombre. Ahora bien, ¿cuáles pueden ser los indicios para darse cuenta de que se está sufriendo algún tipo de violencia en contra de la mujer por parte de su pareja? La CNDH menciona los siguientes [3]:
- “Recibir mensajes de acoso.
- Parecer tener miedo de su pareja o mostrarse ansiosa por complacerla.
- Tener un acceso limitado o ningún acceso a las finanzas o la toma de decisiones.
- Mostrar cambios en la personalidad, la conducta o la apariencia física.
- Dejar de atender las necesidades mentales, emocionales, físicas y espirituales”.
Asimismo el Gobierno de México menciona algunos factores que pueden incrementar la vulnerabilidad a sufrir violencia que se suman a la situación de vulnerabilidad de ser mujer. Son los siguientes [4]:
- “Incapacidad o dificultad para defenderse físicamente o comunicar los malos tratos.
- Acceso restringido a la información y asesoramiento, debido a la existencia de todo tipo de barreras, tanto tangibles como intangibles.
- Mayor dependencia de cierto tipo de asistencias y cuidados de otros el miedo a denunciar el abuso por la posibilidad de la pérdida de los vínculos y la provisión de cuidados.
- Vivir frecuentemente en entornos que fomentan la violencia: familias desestructuradas, instituciones, residencias y hospitales”.
Ahora bien, si sufres algún tipo de violencia o conoces a alguna mujer que es víctima de violencia, se recomienda lo siguiente [5]:
- Denunciar ante el ministerio público. Allí deben tomar tu declaración sin emitir juicios propios, se te debe atender con respeto, utilizar un lenguaje claro y darte toda la información necesaria sobre el proceso a seguir.
- Las autoridades deben brindar las medidas de protección y garantías necesarias para evitar nuevos actos de violencia.
En cuanto a las estadísticas registradas de violencia contra la mujer en nuestro país, un buen referente es la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH). Algunos de los resultados de la encuesta aplicada en 2021 son [6]:
“En 2021, a nivel nacional, del total de mujeres de 15 años y más, 70.1 % han experimentado al menos un incidente de violencia, que puede ser psicológica, económica, patrimonial, física, sexual o discriminación en al menos un ámbito y ejercida por cualquier persona agresora a lo largo de su vida.
La violencia psicológica es la que presenta mayor prevalencia (51.6 %), seguida de la violencia sexual (49.7 %), la violencia física (34.7 %) y la violencia económica, patrimonial y/o discriminación (27.4 %)”.
De acuerdo con la ENDIREH 2021, la prevalencia de violencia contra las mujeres de 15 años o más, muestra que aquellas que experimentan mayor violencia son quienes residen en áreas urbanas (73.0 %); mujeres jóvenes de edades entre 25 y 34 años (75.0 %) y las que se encuentran separadas, divorciadas o viudas (74.0 %) [7]. Asimismo, de acuerdo con los datos recopilados por Naciones Unidas, una de cada tres mujeres en todo el mundo ha sufrido violencia física o sexual, principalmente ejercida por parte de su pareja. Además, el 71% de las víctimas en el mundo de la trata son mujeres y niñas; y 3 de cada 4 son víctimas de explotación sexual [8].
En Un Día Por Todas seguiremos trabajando para concientizar a la sociedad, al gobierno y los líderes políticos y sociales de la importancia de hacer sinergias y estrategias concretas para acabar con la violencia que sufren tanto las mujeres, como todos los mexicanos.
Si llegaras a vivir alguna situación de violencia, no estás sola, recurre a las instancias gubernamentales que te mencionamos líneas arriba. Una de las formas más efectivas de detener la violencia en contra de la mujer es la denuncia.
