Día Internacional de Tolerancia Cero contra la Mutilación Genital Femenina

Aunque no lo creas, en pleno siglo XXI existen tradiciones y costumbres que atentan contra los derechos humanos de las personas. Concretamente, existen una práctica que específicamente es contraria a los derechos humanos de las mujeres y niñas, se trata de la mutilación genital femeina (MGF). Esta práctica, por demás dañina y degradante contra las mujeres, consiste en la mutilación total o parcial de los genitales femeninos por motivos que no son médicos, sino por creencias de las comunidades en donde se realiza. Entre los motivos que se dan para realizarla es el  darle “honor” a la mujer, promover su castidad y que logre casarse [1] [2].

Esta práctica puede causar daños severos en la salud de las niñas, como infecciones, hemorragias, esterilidad o incluso la muerte. Por tal motivo, a partir de 2012, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas instituyó el 6 de febrero como el Día Internacional de Tolerancia Cero contra la Mutilación Genital Femenina, con el fin de erradicar esta práctica en los países en que aún se realiza, los cuales son más de los que puedes imaginar. Son cerca de 30 países de África y de Oriente Medio y Asia meridional, así como algunos países asiáticos (India, Indonesia, Iraq y Paquistán) y algunas pequeñas comunidades de Latinoamérica. También existen en las poblaciones emigrantes que viven en Europa Occidental, en Norte América, Australia y Nueva Zelanda [3]. Los derechos humanos que esta costumbre viola en particular son los derechos a la salud, la seguridad y la integridad física, el derecho a no ser sometidas a torturas y tratos crueles, inhumanos o degradantes, y el derecho a la vida en los casos en que el procedimiento acaba produciendo la muerte [4].

Ahora bien, entra las estadísticas de las niñas y mujeres que han sufrido esta terrible práctica se encuentran las siguientes [5]: 

• Se calcula que hay por lo menos 200 millones de niñas y mujeres mutiladas en el mundo.
• Cada año cerca de  tres millones de niñas son mutiladas.
• Cerca de 44 millones de niñas menores de 14 años han sufrido este procedimiento, principalmente en Gambia (un 56%), Mauritania (54%) e Indonesia.
• Los países con la prevalencia más alta entre mujeres y niñas entre 15 y 49 años son Somalia (58%), Guinea (97%) y Djibouti (93%).
• Se cree que para el 2030 aproximadamente 86 millones de niñas en todo sufrirán algún tipo de mutilación genital.

Ahora bien, se pretende lograr la erradicación total de la MGF para el año 2030. Actualmente, se han reducido las estadísticas de esta práctica pero debe hacerse un esfuerzo constante para mantener el proceso que lleve a que se elimine completamente, y evitar que las crisis humanitarias como la pandemia que acaba de suceder, hagan retroceder estos logros, según lo que se expresa por parte de la ONU. Asimismo, se busca formar alianza con los varones para que se solidaricen para apoyar en la erradicación de esta costumbre [6]. De hecho, el secretario general de la ONU. Antonio Guterres, ha comentado: “Hago un llamamiento a los hombres y niños de todos los lugares del mundo para que, juntos, alcemos la voz y demos un paso al frente para acabar con la mutilación genital femenina, en interés de todos” [7].

Como ya se mencionó, esta práctica, además de violar derechos humanos fundamentales de niñas y mujeres, ocasiona serios riesgos a la salud a corto y largo plazo. Entre ellas se pueden enumerar: dolor crónico, infecciones, sangrados, mayor riesgo de transmisión del VIH, ansiedad y depresión, complicaciones durante el parto, infecundidad y, en casos extremos, la muerte. Actualmente hay esfuerzos de parte de la ONU para erradicarla; concretamente hay un programa que ha apoyado por lo menos a 11 000 organizaciones en las cuales participan coaliciones y movimientos dirigidos por supervivientes, quienes abogan para que haya cambios en las políticas y las leyes y las normas sociales [8]. 

Esperamos que esta información te ayude a tomar conciencia de la realidad que en la actualidad padecen muchas mujeres y niñas en otras partes del mundo, y como sociedad, nos solidaricemos con ellas. ¿Cómo lo podemos hacer? Primeramente, informándonos de la situación, para lo cual este artículo puede ayudarte a ese fin. Asimismo, apoyando en la medida de lo posible las acciones y medidas que se estén tomando para erradicar esta costumbre que daña los derechos humanos y la salud de tantas mujeres.