Sobreviviendo al cáncer de mama: tres testimonios que te ayudarán

Como te mencionamos en el blog de la semana pasada, el 19 de octubre se conmemoró el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, día instituido por iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El objetivo de esta conmemoración es concientizar a las personas de que la detección temprana de este tipo de cáncer mejora el pronóstico y, en consecuencia, mejora la supervivencia de las pacientes que sufren esta enfermedad [1]. 

 

También mencionamos que si se llega a presentar el cáncer de mama, actualmente el tratamiento es muy eficaz, con probabilidades de supervivencia del 90% o más, sobre todo cuando la enfermedad se detecta a tiempo. La mayoría de los cánceres de mama pueden tratarse hoy con una intervención menos invasiva llamada “lumpectomía” o mastectomía parcial. Con ella solo se quita el tumor y se aplica radioterapia para que sean menos las probabilidades que el cáncer regrese [2].

 

En esta ocasión te compartimos el testimonio de tres valientes mujeres que padecieron cáncer de mama y sobrevivieron. Ellas nos transmitieron su experiencia con el objetivo de brindar esperanza a todas las mujeres que actualmente padecen esta enfermedad y se encuentran en tratamiento. Si tú, querida lectora, actualmente atraviesas por esta enfermedad, queremos decirte que no estás sola y a través de la lectura de estas líneas la intención es llevarte una dosis de esperanza y optimismo, así como nuestros deseos de que pronto recuperes tu salud.

 

El primer testimonio que te compartiremos es el de Isabel, quien gracias a su ginecólogo se dio cuenta de que tenía cáncer de mama. Él la revisó y sintió un tumor en uno de sus pechos. Nos contó que antes de ese examen ella nunca sintió dolor. Su ginecólogo le solicitó que le realizaran una biopsia lo antes posible. Isabel nos compartió: “Y así encontraron mi cáncer llamado Carcinoma ductal invasivo: estadio 3.  Después de ocho tratamientos de quimioterapia y una pastilla diaria por cinco años, sigo viva y todo se lo agradezco a mi médico. Sin él, jamás hubiera sabido que tenía un tumor creciendo dentro de mi”. Isabel terminó diciéndonos: “No dejen de checarse cada mes y ver a su ginecólogo.  No importa qué edad tengan”.

 

Otro testimonio es el de Luly, quien es sobreviviente de cáncer gracias a una revisión médica. Nos contó que asistió a un evento de la “Cruz Rosa” al cual ella no pensaba asistir porque estaba complicada, sin embargo, se le acomodaron los tiempos. Allí se sacó un premio que consistía en un chequeo. Luly nos dijo: “En ese chequeo fue donde me lo detectaron y ese premio para mí fue el premio mayor porque fue el salvarme la vida”. Nos comentó que está muy agradecida con Dios, que siguió todo el proceso con muy buena actitud y con mucha fe. Comentó: “Yo lo que les recomiendo y lo que les puedo dar de testimonio a todas las mujeres es que con todo chequeo a tiempo, de verdad, se logra salvar la vida. No dejen sus revisiones, dénse esa oportunidad, no lo piensen. A veces nos da temor, pero de verdad sale uno adelante. Mucho ánimo a todas”. 

 

Por último te contaremos sobre Kokis, una sobreviviente más de cáncer de mama. Ella nos dijo que tuvo cáncer de seno etapa 4 en la mama derecha en el 2000 y en el año 2003 le regresó in situ (esto es, en el lugar original donde se formó) en la mama izquierda. Kokis manda un mensaje especial a todas las mujeres que actualmente están padeciendo esta enfermedad:

“Saludo a todas las personas que en este momento se están enfrentando a una noticia muy difícil de aceptar, pero es necesario entender lo que está sucediendo. El simple hecho de escuchar la palabra de ese padecimiento nos llena de miedo. Primero viene la negación y luego la incertidumbre, y ese es el punto que quiero tocar. Tenemos que aceptar, pero a la vez ser positivas, para que el miedo quede fuera. Tienes que entender que este es un trance en tu vida, de ti depende que este huésped se quede o se retire. Háblale a tu cuerpo, date un tiempo para escucharlo, pregúntale qué es lo que está dañado, él te lo dirá con síntomas, tú comunícate con él, dile que lo ayudarás en todo y pídele que él haga lo mismo contigo, que tú tienes de aliado a Dios, al doctor y tu actitud. Dile que estás triste porque no viste la señales que te mandó —tu cuerpo— que las ignoraste pero que siempre lo has amado y que estás dispuesta a soportar todos y cada uno de los tratamientos con amor, sin queja y estar pendiente de escuchar cualquier cosa que no se alinee. 

 

Que este padecimiento que estás teniendo lo entiendes y lo aceptas con amor porque sabes que esto será por un tiempo y no para siempre. Dile a cada momento a tu cuerpo que lo quieres y que estás dispuesta a abrazarlo, al cáncer. Siento por mi experiencia que es la forma de manejar una enfermedad, aceptarla, quererla y ser positiva. El amor cura, no lo olvides. Recuerden que el dolor es inevitable, el miedo es opcional. Obedece al doctor y sigue tu corazón”.

 

Esperamos que los mensajes de estas tres mujeres te llenen de esperanza si estás pasando por esta enfermedad. Si te toca acompañar a alguna mujer que está padeciendo cáncer de mama, recuerda que existen herramientas para hacerlo como el documento publicado por el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) titulado “Acompañamiento emocional a mujeres diagnosticadas con cáncer de mama. Manual para personas facilitadoras” [3], el cual te compartimos anteriormente.

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